Ha de morir el brote
Para nacer la espiga.
De las entrañas de este pan
Un gusto a cera derretida
Hace nido en los labios.
Ocioso es preguntar de qué ceniza
Será grano nuestra palabra.
Sin embargo, escogemos la semilla,
Volteamos la parva,
La vela gotea en la harina.
¡Qué metafórico!
ResponderEliminarNo sé si te he entendido bien, o es que todo me lo llevo al mismo terreno. Pero me sirve y me gusta.
Un abrazo.
Casi a cualquier terreno en el que la palabra desempeñe un papel, Dinojuanjo, se puede llevar. De modo que, si te ha gustado, me gusta que te guste.
ResponderEliminarTan volteados que ya estamos de cabeza, y veremos que pan hace este trigo, que no creo que sea bueno porque la bilis amarga
ResponderEliminarEsa es harina de otro costal, Paco.
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