Páginas

13 de junio de 2011

Operaciones

Siento su aliento aquí, justo en el pestorejo, mientras me hurga los bajos y una tromba de himnos inunda mis oídos.

-¿Una tropa de indios, dice usted? ¿Es que le hago daño?

Sss... No; pero duele. Miro al fondo del salón: la pantalla recién estrenada sigue allí. Siento las llaves del coche en el bolsillo; pero no siento los pantalones.

-Lo ha puesto usted todo perdido. Ya se encuentra mejor, ¿verdad?

Siento como si tuviera algo taponado u ocluido. Y ese olor a incienso y el ruido de pezuñas...

-No mire usted hacia abajo o volverá a desmayarse.

Tengo recuerdos que no son míos y culpas que no me pertenecen.

-¿Está usted seguro? Ande, no se queje... Puede usted hablar, incluso a gritos, puede escribir, hacer el amor, firmar cheques, votar o broncearse en la playa... Y puede usted ir pensando en pagar la cuenta.

¿Qué cuénta? ¿Cuánto le debo?

-La vida, señor: la vida entera.


  • Fuente de la imagen: Wikipedia. Dominio público.

7 comentarios:

  1. Es lo que tiene cuando el diablo te viola. O Dios que es lo mismo.

    ResponderEliminar
  2. Si no fuera por lo que implica que te anestesien...tiene que molar una barbaridad volar con esa mierda...que maravilla de locura.
    Salu2

    ResponderEliminar
  3. Se me quedó la sensación de ir al médico, pero para algo no muy bueno.

    Abrazo

    ResponderEliminar
  4. Ahí le has "dao", maño, aunque, cuando lo escribí, pensaba más en otro tipo de diablos o de dioses.

    Caray, Markos, que la voz cantante del relato, si está anestesiada, lo es por algo que no se inyecta directamente en las venas. La realidad es, a veces, suficientemente estupefaciente.

    Me parece, Jose Jaime, que en eso andamos todos (no está solo el "prota" sufridor del relato): en un tratamiento de choque entre refinado y brutal.

    ResponderEliminar
  5. Vaya, vecino, parece que has perdido la virginidad (la que sea) a manos (o lo que sea) de algo pelín nauseabundo. Lo mejor para sanar es lo que dice el aludido: cheques y baños de sol.

    ResponderEliminar
  6. En respuesta a lo que le dices a Markos, es una pena, pero realmente suele ser estupefaciente con mayor frecuencia de la deseada...

    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. Paco: como le digo a Jose Jaime, el protagonista representa al ciudadano medio, más o menos.

    Dinojuanjo: el problema puede ser que esa estupefacción nos inmoviliza más de lo deseable. Es, a veces, una estupefacción controlada, pero no por quien la sufre o padece.

    ResponderEliminar

Piénselo bien antes de escribir