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15 de marzo de 2010

Mirando hacia las vigas

Puede parecer impropio de un actor que tenga el atrevimiento de expresar libremente su opinión y, quizá, equivocarse, sobre todo cuando sus palabras contradicen lo que algunos consideran políticamente correcto. Menos osado parece, en cambio, que, por parte de quienes dicen defender la libertad, se relacionen sus palabras con el tamaño de su pene o que se pague una pasta gansa a personajes de variado plumaje por decir tonterías o atrocidades en la caja tonta.

No voy a ser yo quien salga a defender a Cuba o a Venezuela. Mas resulta hipócrita lanzar piedras contra los gobiernos de Chávez o Castro, por dictatoriales, cuando en España no hemos tenido el valor ni las ganas de condenar la dictadura franquista.

Puede que Willy Toledo sea un radical y que esté mal de la cabeza. Y puede que no sea demócrata en el sentido neo-liberal de la palabra (si es que este sentido tiene alguno). Seguramente no sea un buen argumento pretender que se mire un poco hacia la viga en el ojo propio tanto como se mira, a veces con ojos o espejos de alinde, la paja en otros.

Toledo, el radical, aseguró que en España se violan los Derechos Humanos, refiriéndose a las cárceles y a los CIEs. Con respecto a éstos, SOS Racismo, Ferrocarril Clandestino, Médicos del Mundo y CEAR han denunciado repetidamente irregularidades, maltratos y torturas, que el ministro Rubalcaba negó en un comunicado a finales del año pasado. CEAR habla, en su informe sobre la situación de los CIEs, de constatación de malos tratos y torturas en los centros de Valencia y Madrid, por ejemplo. El último episodio en el CIE de Aluche es muy reciente: 150 internos iniciaron el pasado día 10 una huelga de hambre. El detonante, según Nueva Tribuna, fue el trato recibido por un angoleño que iba a ser deportado y acabó en el hospital.

Si buscamos ejemplos en las cárceles, sin necesidad de hablar del caso de Amadeu Casellas, me gustaría saber qué piensan tantos demócratas de pacotilla de lo que ocurre en algunas andaluzas, cuyos presos no pueden recibir tratamiento médico por falta de policías que los custodien. "El Defensor del Pueblo Andaluz, la Asociación Proderechos Humanos de Andalucía y los fiscales de vigilancia penitenciaria llevan años denunciando" la situación (fuente: Reyes Rincón en El País).

Si se rascase un poco... Rásquense demócratas y rásguense las vestiduras y digan que Willy Toledo la tiene pequeñita.

4 comentarios:

  1. Desgraciadamente lo que tenemos pequeñita es la democracia, y demasiado grande y dura, algunos, la cara.

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  2. Todos cometemos errores. A mi no me gustaron las declaraciones de Toledo sobre los presos cubanos, pero eso no significa que no pueda tener razón en otras. Me da que el problema son los extremos, o la aparente necesidad de mantener ciertas posturas a riesgo de todo. En cuanto a la democracia... no es oro todo lo que reluce.

    Carpe Diem

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  3. Correcto, Adolfo. A mí tampoco me gustaron o, quizá, no las entendí. Mas la que le cayó encima a Willy, no sólo de parte de lo más reaccionario del país, me pareció completamente hipócrita.

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