Como estoy de guardia, seré quien añada unas palabras a tu comentario, Gato. Conozco bastante bien a Oulipo como para no temer malinterpretarlo. No es tanto desprecio de la religión, ni siquiera del dogma, como de las estructuras que convierten éste y aquélla en supuestas verdades que pueden defenderse e imponerse con la espada, muchas veces en contradicción con lo que se defiende.
En nombre de Yaveh, de Dios o de Alá se han cometido muchas barbaridades. Y esto, que es indiscutible, tendría que remover la conciencia de quien tiene fe. Mas tampoco se desprecia aquí la fe, sino la fe ciega.
No te falta razón, Cypher, esa es la cuestión, como en tantos otros temas. Hay cosas que no son dignas de crítica per se, pero sí la forma en la que se desarrollan, por pura inercia sin filtrado previo.
Que enorme cantidad de "desprecio" a la religión noto por aquí... Pero un desprecio sano... ¿Me equivoco?...
ResponderEliminar¿Sabes qué? He repasado una vez mas "Animátrix"...
Como estoy de guardia, seré quien añada unas palabras a tu comentario, Gato. Conozco bastante bien a Oulipo como para no temer malinterpretarlo.
ResponderEliminarNo es tanto desprecio de la religión, ni siquiera del dogma, como de las estructuras que convierten éste y aquélla en supuestas verdades que pueden defenderse e imponerse con la espada, muchas veces en contradicción con lo que se defiende.
En nombre de Yaveh, de Dios o de Alá se han cometido muchas barbaridades. Y esto, que es indiscutible, tendría que remover la conciencia de quien tiene fe. Mas tampoco se desprecia aquí la fe, sino la fe ciega.
No te falta razón, Cypher, esa es la cuestión, como en tantos otros temas. Hay cosas que no son dignas de crítica per se, pero sí la forma en la que se desarrollan, por pura inercia sin filtrado previo.
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