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29 de julio de 2012

Vientos del pueblo podre

Vientos del pueblo me llevan
A un chiringuito en la playa
Donde rumia y muge el buey
Arropado en arrogancia
En la testa una bandera
Con el pus de las Españas

Yacimientos de leones
Con la melena embarrada
Con artimañas de cuervo
Desfiladeros de águilas
Y cordilleras de toros
Con la lengua a media asta

Nunca medró tanto grey
Con tal traza de alimaña

4 comentarios:

  1. ¿Esta es la cara B del poema de Miguel Hernández? Seguro que anduvo dubitativo entre los dos.
    Este es mes de chiringuito, ya sea podre u opulento. En septiembre empezaremos la revolución. No hay nada que no pueda esperar a que nos oreemos de frente y de perfil.

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    1. ¿La cara B? Quizás. El de Hernández era un long play. Cierto que puede ser algo así como su negativo en microfilme. O, por lo menos, esa era mi intención.

      Ojalá que águilas, toros, leones, gorriones e, incluso, bueyes se oreen bien, vecino.

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  2. La corrupción campa tan a sus anchas que, si te refieres en concreto al caso Malaya, que no estoy segura, yo diría que es casi anecdótico. España está llena de caciques con bueyes bien alimentados.
    El poema, espléndido, como siempre. Casi diría que no tiene nada que envidiar al de Miguel Hernández.

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    1. No es solo la corrupción. Pensaba en toda clase de bueyes, es decir: en lo que Miguel Hernández llamaba pueblo; aunque el de Orihuela pensase que no está(ba)formado por esa clase de bóvidos.

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