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16 de mayo de 2012

Gases

Ed elli avea del cul fatto trombetta

      Había prometido cambios, circunstanciales y, sobre todo, estructurales, y palo largo y mano dura, dentro de un orden, si hacía falta. Así que, el día en que se hicieron públicas las reformas, la expectación era, más que enorme, abracadabrante.
      De la tribuna no salió su voz anodina, sino el estruendo de una ventosidad rozagante, a la que sucedieron puros cuescos de toda laya: coruscantes, tartamudos, en tirabuzón... Todos con vocación de infinito y muy, muy liberales.
    Sin embargo, fue el pedo final, uno de esos follones que hubiera hecho las delicias de Panurgo en Samilgondín, el que convenció a tirios y troyanos de manera definitiva e irrevocable, no tanto de la necesidad de algunos ajustes, como de la inevitabilidad de soportar durante años una hedentina más poderosa e inmarcesible que la de miles de zahúrdas juntas.

7 comentarios:

  1. Veo que los cambios estructurales han llegado hasta tu blog... me gusta este estilo más limpio.
    Salu2

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    1. Cierto, Javier. Pero no han sido impuestos por ningún pedorro. En realidad, es un lavado o aclarado de cara, pues la plantilla es la misma.

      Saludos.

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  2. Gracias por la alabanza, Muñekita. Y, gracias, también, por el ofrecimiento. Sin embargo, no hago nunca intercambio de enlaces.

    Dispongo de un blog-roll que no está visible y otro, que puede observarse en la columna, de páginas de información y opinión que suelo consultar con la frecuencia que me permite el tiempo de que dispongo. Asimismo, en el menú de cabecera, voy incluyendo, como mucha pereza y lentitud, páginas que, por uno u otro motivo, considero de interés. En otras ocasiones, si me parece necesario, enlazo en las entradas. En todos los casos, lo hago por iniciativa propia y desinteresadamente: no pido nada a cambio, sino que divulgo lo que me parece apropiado.

    Comprenderás, por tanto, que tenga que declinar la invitación. No soy partidario de hacer las cosas así, de buenas a primeras, como tú planteas.

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  3. Para que el cambio sea patente no hay como apoyarlo con una tormenta de truenos :-D Tras la batalla se hace el silencio y todos prestan atención, aunque no haya habido cambio :-)
    Salu2

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  4. Lo malo de este concierto de gases es que se trata de las fanfarrias que anuncian la gran supercagada. Entonces será cuando nos caguemos de verdad y para siempre.

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